-¿Qué tan difícil puede ser encontrar una cámara análoga con fotómetro integrado?, supongo que lo del fotómetro podría ser negociable, pero quiero que esté en buen estado, es que ya estoy chato y no sé dónde más buscar.
- Mira, tengo una zenit con fotómetro, lo que pasa es que la tengo guardada hace caleta de tiempo, hagamos una cosa llévala, me pagas la mitad y si esta buena me la pagas, completa si no me la vienes a devolver, ¿te tinca?
-¿Por qué tan honesto?
-Es que hace tiempo que ya nadie me venía a preguntar por una cámara análoga y soy un tipo nostálgico, sino no vendería cachivaches, ¿no lo crees?
- Eso es muy cierto. Ya entonces quedamos en eso, pero con boleta.
-Obvio.
- Soy honesto, pero pago impuestos.
No puedo creer que tenga una cámara con fotómetro, pero ahora cómo saber si está buena, lo primero creo que será dejar de hablar solo, porque la gente cree que estoy loco y en alguna forma no creo que estén del todo mal, ahora a ver si la cámara esta buena, saltaría como conejo, pero no. Voy a pasar a la fotográfica a comprar papel y a ver si me pueden decir si la cámara funciona, pero mi intuición de fotógrafo me dice que sí, por lo menos el fotómetro funciona; dispara bien, no creo que tenga problemas para correr el rollo, esto es genial.
-Buenas tardes joven, que busca.
-Buenas tardes, ¿tiene papel fotográfico fotosensible?
- No, nos queda, pero al frente también hay una tienda que vende articulo de fotografías parece que ellos sí tienen.
Pudo haber sido el fin de nuestra conversación, pero le pregunte sobre mi cámara como no quería que pensara que era un aficionado, le conté que la duda que tenía era si la cámara tenía alguna fuga donde le entrara luz, con lo que podía velar la película; me sentí muy bien cundo me dijo que estaba buena, lo mejor fue a que le pedí que pusiera la película, no es que yo no supiera es sólo que no quería arriesgarme. Todo eso del buen estado de mi Zenit me hizo pensar en que podría quedarme con la cámara y no volver a pagarle lo que había quedado debiendo, pero sólo lo pensé, supongo que la honestidad en casos como estos es un mal hábito.
Salí de la tienda, seguí caminado y encontré la otra tienda que decía venta de artículos para fotografía dije “esta es la mía” entre y pregunté por papel fotográfico fotosensible, lo malo es que el vendedor no tenía idea de lo que le estaba pidiendo y trato de venderme papel para imprimir, yo tampoco estaba muy seguro de que no fuera ese, así que le pregunte.
-¿Pero este es el que se trabaja con la ampliadora?
-Sí, es este mira tómalo.
Esa era la prueba irrefutable de que no era lo que estaba buscando, es obvio que al ser fotosensible reacciona con la luz, el sentido etimológico de la palabra lo dice, al final tuve que irme en mala con el tipo que estaba vendiendo, porque no quería entender que eso no era lo que andaba buscando, el loco porfiado, pero como dice mi madre hay de todo en la viña del señor.
Estaba tan contento de tener la Zenit en mi poder que se me había olvidado que tenía clases, ¿cómo se podría estar en una clase de ciencias, pensando en mitocondrias y organelos teniendo un mundo que fotografiar con una película de cien asas?, lo único que quería era salir, pero como mi profesora es ante todo profesora y luego doctora en ciencias nos estaba explicando cómo se podíamos usar la estrategia didáctica en el primer ciclo, supongo que hubo una pate de la clase donde me fui completamente sin salir de la sala, porque cuando llegue ella ya estaba cerrando la clase, lo último que dijo mi profesora me dio escalofríos; dijo que la mejor estrategia que podíamos usar era la que ella había usado hoy. Que era una de las más entretenida y lúdicas, que no fallaría con los chiquititos de primer ciclo, espero que ninguno de “mis chiquititos de primer ciclo” les coman por ir a sacar fotos con una Zenit que tengan en la mochila, porque ni el mismísimo Piaget habría podido crear una estrategia didáctica para luchar contra aquello, lo bueno fue que después de eso la clase terminó.
Me sentía tan contento, parecía cosa de serie gringa dónde todo había pasado el mismo día, pero cómo estoy seguro que no soy Sofía (la del mundo se Sofía) seguí mi camino, que cautico suena, cuando llegue al corredor donde estaba cambiando las baldosas… yo lo hubiese visto de no ser por estaba sacando la cámara de la mochila, me tropecé y me caí cuando llegue al piso me afirme con las manos para no sacarme un diente, ese movimiento de manos me salvo la dentadura y tal vez mi nariz.
Cuando las cosas pasan tan rápido uno omite algunas cosas y luego cuando deja de actuar instintivamente, recuerda que hay cosa más importante que perder un diente o quebrase la nariz me di cuenta que yo tenía mi Zenit en las manos y ahora mis manos estaban en el suelo, la había perdido, me arrepentí de haber sido honesto, no debí haberle pagado, cuando sentí una voz, era como del más allá.
-¿Estás bien?
-Sí, pero mi cámara.
-Acá la tengo, no sabía si era bueno agarrar la cámara o agarrarte a ti.
-¿Agarrarme a mí o a la cámara? En otra situación eso se oiría mucho peor de lo que se oye.
-Tiene película.
- Sí, ¿Por qué?
-Acaso no es obvio. No sé si la foto quede bien, depende de la luz y de las asas de la película, pero tu cámara esta re buena, yo tengo una Canon, pero sin fotómetro.
Era evidente me tomo una foto, lo encontré algo un poco patudo de su parte, pero sabía de asas, de cámaras y de luz eso hubiese sido menos raro si yo no estuviera en el piso, cuando me pare y me devolvió mi Zenit, mi maravillosa Zenit, le iba preguntar cómo se llamaba, pero en un momento entre que me paraba y me devolvía la cámara ya había dicho todo eso y según lo convencional ahora era mi turno de responder las preguntas de rigor.
-Edmundo, estudio pedagogía básica.
-Edmundo cómo…
Si decía como el tipo del reality, me habrá molestado mucho, pero no sé qué habría hecho realmente, a lo mejor nada, pero lo que pensara de ella ya no sería tan bueno como la primera impresión que tuve, pero lo que dijo me hizo sentir ignorante y más como futuro profesor, pero ella no lo supo en ese momento por lo menos, pero se lo conté un tiempo después.
-Edmundo cómo…Edmundo Dantés.
-Sí… como él.
Haciendo algo que no estoy muy acostumbrado a hacer, me puse a conversar con ella saque por conclusión que ella, Leonora, era más fotógrafa de lo que yo era, pero por extraño que suene me sentí muy cómodo hablar con ella de estas cosas, de todo, incluso le conté lo del papel, ella me dijo que el tipo era muy cargante, que le había pasado lo mismo.
Mirándola de forma detenida, era bien bonita tenía el pelo largo oscuro, lo que más me llamo la atención fueron sus ojos no porque sean el reflejo de alma sino porque tenía uno café y el otro verde, era muy raro como de bruja, pero no era fea, me pregunto cómo la habré mirado que me dijo que sí, que sus ojos eran de distinto color.
Nos pusimos a hablar de todo un poco cuando me atrevía preguntarle algo que era muy necesario, pero no quería preguntar porque no la conocía hace tanto menos de tiempo prudente como para preguntar una cosa como esa pero me animé y le pregunte.
-¿Tiene dónde revelar? Y si ¿tienes me lo podías prestar?
-Sí, ¿pero cómo no sé que eres un hombre peligroso?, supongo que se puede conversar.
Y lo conversamos unos días después. Increíble que estábamos en la misma “U” y nunca la había visto, sin embargo, a sus amigos siempre los veía, cuando hice un viaje al pasado tratando de hace una retrospectiva, las pocas veces que había puesto atención a su grupo social, siempre había alguien que tenía la cabeza detrás de un libro, asumo que sería ella, quedamos en que sí, eso me dio mucha alegría, pero me pidió otra cosa a cambio.
Nunca creí que me pediría eso, estamos en que yo si fui un poco patudo al pedirle que me prestara su laboratorio, pero ella se pasó, me pidió que fuera su compañero, que lo acompañara a sacar fotos para aprovechar la luz del alba, la loca cree que me voy a levantar tan temprano, está muy loca, …pero ella me prestó el laboratorio y creo que lo lógico es retribuirle, quedamos en que después de ir a sacar las fotos con la luz del alba rebelaríamos.
Me dejo claro que no es que buscaba algo así como sentimental, era sólo que salir tan temprano podía resultar algo peligroso, porque a esa hora es cuando salen todos los que viene del carrete; también me dijo que no era porque fuera un macho recio, porque de hecho no lo era, sino que por ser otra persona ya no iría sola, que se cree, que no soy un macho recio, puede que no lo sea pero no es educado señalarlo de tal manera.
Días después fuimos muy temprano al mercado y luego a la parte dónde están las casas más viejas de la ciudad, a Leonora le llamó la atención la cantidad de aves salvaje que había, las bandurrias, los treiles, los tiuques, la respuesta que le di fue algo que no le había dicho a nadie, porque nadie parecía importarle.
-Lo que pasa en que esta ciudad se está expandiendo mucho, por ejemplo el cementerio, ese cerro que está detrás antes era más grande y abajo hay una población, antes eso era pura vida salvaje y los gorriones, esos pajarracos le quitan los nidos a lo pajarito como las tencas.
-Ah, no tenía idea.
-Oye ahora que hay un poco más de confianza ¿quién es Edmundo Dantés?
Al principio se rió pero luego me dijo que era el Conde de Monte Cristo, así sí lo conocía, la verdad fue un día provechoso, en cuanto a las fotos que tomamos, porque a la hora de revelar me di cuenta que yo sólo había hecho las fotos, pero nunca había revelado una película, fue una lata, cuando saque la película del cilindro, me corte, cuando puse el rollo en el tamborcito con los líquidos fue una lata moverlo en ocho cada treinta segundos, pero hacer las fotos estaba bien buenas, me gustaron, sobre todo la de bandurria y la garza cuando la tome no me di cuenta que había caleta de otros pájaro atrás.
Leonora me dijo podría participar en el concurso de la “U”, me entusiasmó así que hicimos la foto como la pedían las bases del concurso y la mandamos, si hubiese ganado eso si habría sido cosa de serie gringa, no gane me decepcioné un poco, pero Leonora me dijo.
-Creo que sólo Capa con su miliciano podría haber ganado la primera vez que participara en un concurso, en lo personal pienso que tu foto estaba bien buena, pero supongo que tu denuncia de la destrucción de ecosistema de las aves de Temuco no es muy social que digamos; a lo mejor a tu foto le falto un poco de sangre.